Ninguna relación existe entre La Verdad, La Unidad y El Espíritu, si no es gramatical...
Son sinónimos; tres expresiones gramaticales, que antes de haber sido usadas en la redacción de cualquier texto bíblico, hacen alusión estricta a un mismo asunto.
La Verdad, La Unidad y El Espíritu son sustantivos propios abstractos, que se refieren a una misma cosa: La Oniria, es una expresión origen Sánscrito usada para referirse a la tierra prometida, y que corresponde con la imagen exacta del paisaje real en la geografía, pero que solo se puede visitar si se goza de especial sobriedad y lucidez mental, cuando entramos físicamente en Reposo, para actuar estelarmente en los sueños.
No hay pues diferencia alguna entre los términos gramaticales usados como sinónimos del nombre de Dios en Las Escrituras. Dios es La Verdad...! Resulta evidente entonces el significado de la palabra Dios, y el pronombre personal UNO, cuando se refiere al sí mismo en primera persona del plural, como seres vivos mentalmente lúcidos y razonables. Dios es la naturaleza de Uno mismo..., nuestra propia energía solar trascendente, viva y dotada de inteligencia. La Energía Solar viva no se ve, es invisible a los ojos físicos, y es aludida en el lenguaje bíblico a través de la palabra Espíritu, escrita con letra E inicial mayúscula.
Empero, vemos en español, algunos usos de la palabra espíritu, escrito con letra e inicial minúscula. Se hace referencia estricta al vehículo hipotético el cual los seres vivos se desdoblan desplazándose a través del tiempo y la distancia mientras el cuerpo material reposa inconsciente inmerso en el sueño.
Nada de lo que se puede ver en el mundo material es visible a los ojos del espíritu. Asimismo, nada de lo que se puede ver en la dimensión de los sueños es visible a los ojos físicos. De manera que, Uno es realmente invisible, si al pararnos frente a un espejo, consideramos que lo que vemos es sólo la imagen de nuestro cuerpo, reflejada en esa luna. Pero aquello que vemos no es Uno, si es que el espejo en el cual nos miramos, no está en el sueño...!!!
A través del sueño, Uno puede verse a sí mismo reflejado en un espejo...! Y seguramente, si consideramos la imagen especular del panorama de fondo, como la dimensión hipotética de los sueños, seguramente entenderemos lo que significa observar el panorama de fondo, en un espejo desde La Oniria... El espejo pues, no es un artificio mágico de uso litúrgico en las ceremonias místicas, sino un instrumento litúrgico de uso místico en las ceremonias trascendentales. No es lo mismo observar el panorama a través de un cristal, que observarlo a través de un espejo. La retrovisión está limitada al plano inminente, pero la percepción lúcida del sentido de la visión, va más allá del escenario real. Sólo se necesita de un minuto de absoluta LUCIDEZ MENTAL para entender esto... Y cuando hablamos de visión lúcida de los sueños, hacemos alusión estricta de la Fe...
Tener fe, no es creer - simplemente - que lo que no se ve exista, sino, poder ver con los ojos del espíritu, mentalmente lúcidos durante el reposo corporal, lo que no se puede ver con los ojos físicos.
En esto consiste la verdadera doctrina: en interpretar perfectamente lo que se lee en Las Escrituras...!
La visión o sentido de la vista en absoluta lucidez mental a nivel del espíritu (el sueño), es lo que en teología llamamos la virtud de la fe. La virtud de la Fe, es considerada un verdadero un tesoro en vasos de barro, para que la excelencia de poder sea de Dios y no de la personalidad humana. Así que, leemos e interpretamos objetivamente el siguiente pasaje:
2 Corintios 4:16-18
16 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día.
17 Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;
18 no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.El Espíritu pues, es la Luz Solar resplandeciente y absolutamente consciente de la Oniria... El Dios Único al que los verdaderos adoradores adoran en espíritu y en verdad, es el SOL ONÍRICO... La majestad del día en la visión admirable de un sueño, mentalmente lúcidos. En el Evangelio según san Juan, Capítulo 4: 23-24 encontramos textualmente lo siguiente:
23 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren.
24 Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren. https://youtu.be/CHQP7OQra4c
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